Descripción
La dermatitis atópica, también conocida como eczema atópico, es una enfermedad crónica de la piel caracterizada por inflamación y sequedad cutánea. Afecta principalmente a niños, aunque también puede persistir en la edad adulta. Se manifiesta con brotes de enrojecimiento, descamación y picazón intensa en diversas áreas del cuerpo, como el rostro, cuello, manos, pliegues de la piel y extremidades. Su distribución puede cambiar en función de la edad del niño, afectando diferentes zonas a lo largo del tiempo.
Diagnóstico
El diagnóstico de dermatitis atópica se realiza mediante la evaluación clínica. Se basa en la observación de los síntomas característicos, como la apariencia de la piel afectada y la presencia de prurito (picazón) que suelen presentarse de forma recurrente. En algunos casos, puede ser necesario realizar pruebas adicionales, como pruebas de alergia, para identificar posibles desencadenantes o factores exacerbantes.
Si tu hijo presenta síntomas de dermatitis atópica, te recomendamos que consultes a un alergólogo pediatra lo antes posible para obtener un diagnóstico preciso y comenzar un tratamiento adecuado.
